La cirugía consiste en realizar un cortocircuito entre el duodeno y la parte superior del intestino delgado reduciendo, así, el tiempo en el que el cuerpo absorbe las calorías de la comida. El duodeno es el primer segmento del intestino delgado y en la operación se consigue que la comida no pase por él ni por las inmediaciones del páncreas.
En el duodeno está el origen de la señal metabólica que causa la resistencia a la insulina. Esta señal está posiblemente exagerada o mal sincronizada en los pacientes diabéticos, impidiendo la regulación correcta de los niveles de insulina y de glucosa en la sangre».
Además, con esta cirugía también se ha conseguido eliminar en el paciente su hipercolesterolemia (colesterol), reducir la obesidad y la hipertensión arterial.
La intervención metabólica para eliminar la diabetes, sólo está indicada en pacientes con las siguientes características: personas con diabetes tipo 2 –90 por ciento de las diabetes– mal controlada, que requieren mucha insulina o están a punto de necesitarla, con una edad comprendida entre los 18 y 60 años, con existencia de reserva pancreática y con una diabetes de menos de 10 años de evolución.
El 90 por ciento de las personas obesas con una diabetes de difícil control y obligados a inyectarse insulina a diario podrían lograr su curación tras someterse a la cirugía metabólica y antes de llegar al extremo de padecer obesidad severa.
En la actualidad ya no se opera sólo la obesidad mórbida, sino también la diabetes de difícil manejo, dado que en muchos casos la cirugía metabólica está consiguiendo remitir la diabetes y además reducir el peso del enfermo.
Los expertos estiman que en 2010 se contabilizarán hasta 246 millones de diabéticos tipo 2 en el mundo, una cifra que alcanzará los 380 millones en 2025. Además, cada año se diagnostican 7 millones de casos nuevos y fallecen 4 millones de personas por causas atribuibles a este tipo de diabetes.
Padecer diabetes incrementa en tres veces el riesgo de infarto agudo de miocardio y en dos veces la incidencia de accidentes cerebrovasculares».
Fuente: CambioIdeal