Hepatitis


dibujo sobre hepatitis
Se denomina hepatitis a un conjunto de enfermedades que se caracterizan por una inflamación del hígado. Diariamente consumimos gran variedad de alimentos que nuestro cuerpo debe procesar a través de la digestión para que se puedan absorber las sustancias nutritivas.

El hígado es una glándula anexa que se encarga de producir bilis que es liberada en el intestino para favorecer la digestión y por otra parte es el centro del metabolismo energético corporal. El hígado se encuentra del lago derecho del cuerpo, en contacto con el intestino delgado y el diafragma en la parte superior. Está cubierto de una envoltura que lo protege porque es un órgano muy fiable.

Todas las sustancias absorbidas a través del intestino pasan por la circulación sanguínea del hígado, siendo procesadas, para almacenar o ser utilizadas según las necesidades de cada momento.

 

Síntomas y diagnóstico

Los síntomas de hepatitis suelen ser: coloración amarilla de la piel, dolor abdominal, hinchazón, cansancio, orinas más oscuras de lo normal, picazón, náuseas, vómitos y pérdida del apetito entro otros. Los síntomas pueden variar dependiendo de la forma de aparición y la causa de la misma.

Frente a la aparición de alguno de los síntomas de hepatitis se deberá consultar al médico, el cual, dependiendo del cuadro clínico podrá solicitar algunos estudios para clínicos si lo considera necesario.

Algunos de los estudios para clínicos para el estudio de la hepatitis son la ecografía abdominal que permite obtener datos sobre el estado hepático, estudios de sangre para valorar el funcionamiento hepático y búsqueda de marcadores de infecciones virales. Existen estudios más complejos como una tomografía abdominal e incluso una biopsia para los casos que lo requieran según el planteo diagnóstico por parte del profesional tratante.

Algunas hepatitis son agudas, aparecen y se resuelven al cabo de pocos días, en cambio existen hepatitis crónicas que permanecen con la persona durante toda su vida.

Existen diversas causas que pueden provocar una inflamación del hígado que se denomina hepatitis. Las causas de hepatitis se pueden clasificar en inmunitarias, infecciosa o tóxica.

 

Tipos

hepatitis en el hígadoUn tipo de hepatitis menos frecuente es la causada por una causa inmunitaria (hepatitis autoinmune), se caracteriza porque el sistema inmune del cuerpo reconoce las células del cuerpo como extrañas y comienza a atacar al hígado. El daño del mismo es progresivo teniendo diferentes síntomas y evolución dependiendo del grado de la afectación.

Existen varias enfermedades autoinmunes que pueden acompañarse de una afección del hígado, siendo necesario utilizar medicamentos para detener el sistema inmune. La evolución de la hepatitis autoinmune es muy variable ya que depende de los resultados de los tratamientos y las características individuales. En algunos casos puede ser necesario el planteo de un trasplante de hígado.

Dentro de las hepatitis por tóxicos se destaca el consumo de alcohol, el mismo es una sustancia que provoca daño directo sobre el hígado, que es el órgano encargado de su metabolización. La hepatitis por consumo de alcohol no se produce en pocas semanas, requiere el consumo de bebidas alcohólicas a lo largo de mucho tiempo, incluso varios años.

Es una patología frecuente de las personas que tienen padecen de alcoholismo, llevando a padecer de cirrosis hepática en la última etapa de su enfermedad. Hay que tener en cuenta que a mayor consumo de bebidas alcohólicas mayor probabilidad de padecer de hepatitis tóxica, pero tampoco la padecen todas las personas que tienen problemas de adicción con el alcohol.

Las personas con una hepatitis alcohólica suelen presentar episodios en que el abdomen se les hincha por la acumulación de líquidos y coloración amarilla de la piel.

El tratamiento consiste en detener el consumo de alcohol lo antes posible por completo. Dependiendo del grado de afectación del hígado se puede presentar una mejoría de los síntomas o que los mismos continúen si se presentó la cirrosis hepática. Hay que tener en cuenta que el alcoholismo es una enfermedad y se requiere el apoyo de la familia, equipo de salud y grupos de apoyo para combatirlo. No es fácil dejar de beber para una persona que ha consumido por muchos años, pero es posible si se lo propone y cuenta con el apoyo necesario.

Existen infinidad de sustancias que son metabolizadas por el hígado que pueden desembocar en una hepatitis tóxica. Los medicamentos integran esa lista, ya sea por el tipo o por la cantidad excesiva de su consumo, pueden desencadenar una hepatitis tóxica.

Existen algunas patologías que requieren la toma de medicamentos que afectan negativamente el hígado razón por la cual se debe valorar su correcta administración. Dichos medicamentos requieren un control de la funcionalidad del hígado cada cierto tiempo para prevenir la aparición de complicaciones no deseadas por el tratamiento iniciado.

Por otra parte para prevenir la hepatitis tóxica por fármacos se debe evitar la auto medicación, sólo se deberán consumir los medicamentos en las cantidades indicadas por los profesionales de la salud. El consumo de más comprimidos de los indicados lleva a que el hígado tenga una mayor cantidad de sustancias para metabolizar aumentando el riesgo de padecer hepatitis tóxico con el consumo de algunos medicamentos. Hay que aclarar que la mayoría de los medicamentos son completamente seguros en las dosis indicadas por los profesionales médicos.

Finalmente existen las hepatitis infecciosas, las más conocidas, que son causadas por la afectación de virus sobre el tejido hepático. Existen algunos virus como el virus de hepatitis A, B, C, D y E que producen afectación directa del hígado. En cambio existen algunos virus que pueden afectar otros órganos y tejidos, incluyendo al hígado dentro de sus probabilidades.

La hepatitis A, se produce por el contagio del virus de hepatitis A a través de heces y sangre contaminada. Está muy difundida por la facilidad de contagio por el contacto con aguas contaminadas, la inadecuada manipulación de alimentos y el contacto sexual.

Los síntomas de la hepatitis A suelen ser leves, incluyo imperceptibles para algunas personas. Se presenta un cuadro de diarrea, con malestar general, escasa fiebre, cansancio y disminución del apetito. El médico podrá solicitar algunos exámenes de sangre para confirmar la presencia del virus, no existe un tratamiento específico, sino que se buscará controlar los síntomas.

Hay que tener en cuenta que la mayoría de los pacientes se curan si secuelas en 3 meses, pero puede extenderse unos meses más el periodo de convalecencia. Se recomienda reposo, una alimentación balanceada y además de adecuadas medidas de higiene. En las personas mayores o con otras enfermedades la hepatitis A puede ser más grave que para las personas previamente sanas.

La hepatitis B y C son consideradas enfermedades de transmisión sexual, es decir, que los fluidos sexuales con los grandes contaminantes además de la sangre. Otra forma de transmisión es a través de la placenta a su bebé en las madres embarazadas.

En general la hepatitis B no produce síntomas por un largo periodo de tiempo o solamente durante unas pocas semanas. En general el cuerpo es capaz de responder frente a la agresión del virus B y logra eliminar el virus completamente del organismo. Existe un porcentaje menor del 10% de personas que padecen de hepatitis B crónica a lo largo de toda su vida.

Existen medicamentos para la hepatitis crónica que no se utilizan para las agudas, solamente indicándose por parte de los profesionales de la salud aquellos para controlar los molestos síntomas como náuseas, vómitos y picazón generalizada.

La hepatitis C tiene una menor tasa de curación y en general se hace crónica en muchos pacientes. Se suelen utilizar medicamentos para controlar la hepatitis C por el riesgo aumentado de padecer cirrosis y cáncer de hígado.

El virus de la hepatitis D se presenta sólo en pacientes que tienen la hepatitis B a través del contagio por sangre contaminada.

La hepatitis E se transmite a través de materias fecales y sangre contaminada pero es muy poco frecuente en la actualidad.

 

Prevención

La prevención de la hepatitis se debe basar en algunos pilares como el abandono del consumo de alcohol, no tomar medicación por cuenta propia, seguir las pautas de sexo seguro, lavar correctamente los alimentos que se van a consumir y mantener una correcta higiene de manos.

Es importante destacar que actualmente existen vacunas para prevenir la hepatitis A y B que son muy eficaces, evitando el contagio del virus por parte del cuerpo.

 

Vídeos

Hepatitis autoinmune

Hepatitis B

Hepatitis C

Hepatitis crónicas

Doctor Jorge Daruich hablando sobre la Hepatitis A,B, C y virales

 

Puntúa el artículo

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (sin votaciones todavía)
Cargando...
   

El contenido ofrecido en MundoAsistencial.com es sólo para propósitos educativos e informativos. No sustituye consejos médicos profesionales, de tratamientos o de diagnósticos. No desatiendas o tomes decisiones terapéuticas sin consultar los consejos de tu médico ni retrases el tratamiento que te recomienda debido a algo que hayas leído en esta web.


Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

4 ideas sobre “Hepatitis

    • Mundo Autor

      Hola Mari, me alegra que puedas encontrar buena la información. La hepatitis autoinmune se cita al principio en la sección tipos, pero no estaba marcada como negrita, ahora ya la he resaltado 😉

      Si que no había un vídeo sobre ella, disculpas, he añadido un vídeo donde el doctor Albert Parés da buena información sobre ella en mi modesta opinión.

      Tienes toda la razón, que muchas veces se olvidan o presta poca información con las enfermedades raras. Muchos gobiernos y farmacéuticas con la excusa de que su investigación no les da beneficios no investigan o desarrollan medicamentos para ellas. La cual cosa es una injusticia, todo enfermo tendría que tener los mismos derechos. Leí que sólo en Europa hay unos 30 millones de personas afectadas por enfermedades raras.

      Desear que esto pueda cambiar y que tu enfermedad evolucione lo mejor posible,
      Un abrazo!