Llevar un ritmo de vida saludable significa, además de mantener una dieta equilibrada, realizar algún tipo de actividad física diariamente.
Al referirnos a actividad física tampoco nos debe venir a la cabeza salir a hacer running por la ciudad o bien acudir al gimnasio una o dos horas cada día. No, lejos de ser así, llevar un ritmo de vida saludable es mucho más sencillo y accesible que todo eso. Sencillo porque veremos que no nos va a tomar demasiado tiempo y se puede integrar en nuestra abarrotada agenda; accesible porque también descubriremos que puede hacerse de forma gratuita, e incluso ahorrarnos dinero en nuestro día a día.
Para ilustrar este caso, pongamos el ejemplo de que tenemos el alquiler de una casa en Barcelona o Madrid a nuestra disposición, pero no encontramos la forma de acoplar el estrés de la ciudad con nuestra actividad física.
Dependiendo del barrio en que vivamos o trabajemos, tendremos unas posibilidades mayores o menores de salir a tomar el aire, pero a buen seguro que encontramos algún rincón para desconectar y correr un rato en compañía de algún amigo, la pareja o un poco de buena música cuando tengamos libre.
Para los que tengáis poco tiempo, sabed que con caminar a buen ritmo durante 20-30 minutos diariamente ya estaremos seguramente adoptando una pauta de actividad que nos será muy beneficiosa para la salud.
Si estáis de alquiler en una casa de Barcelona, es probable que vuestro presupuesto familiar no os permita afrontar la compra de la vivienda, o bien que estéis de alquiler de forma temporal hasta encontrar algo mejor o reubicaros profesionalmente. En estas situaciones seguramente optéis por el autobús, el metro o el tren para acudir al trabajo. Además de ser más sostenible es más económico.
¿Cómo combinar estos medios de transporte con la salud física? Muy sencillo, podéis aplicar un truco muy simple y poco usado como es bajar una o dos paradas antes de nuestro destino. De este modo os aseguráis esos 20 o 30 minutos de trayecto a pie. Y si repetimos este mismo proceso a la vuelta nos daremos cuenta de que hemos dedicado entre 45 y 60 minutos a caminar entre lunes y viernes. Seguramente mucho más de lo que hacemos actualmente.
¿Y si os desplazáis en coche? En tal caso podéis buscar una zona algo más alejada para aparcar (a no ser que dispongáis de parking de empresa) y que os obligue también a hacer una parte del recorrido a pie o en bici.
Y hablando de bicis, aquí aparece un nuevo método de transporte totalmente saludable. Desplazarnos en bicicleta es una alternativa para según qué trayectos o zonas en las que trabajemos y vivamos.
Si hemos optado por alquilar una casa en Barcelona, Madrid o cualquier gran ciudad, y en estos espacios no nos gusta salir a correr porque no encontramos las zonas verdes o abiertas que nos gustarían, tenemos alternativas que debemos valorar para conseguir mantener ese equilibrio necesario entre sedentarismo laboral y actividad física.
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