Una investigación alemana del Instituto Central de Salud Mental en Mannheim publicada el 2 de marzo en Age an Ageing, indica que tomar diariamente bebidas que contienen alcohol de forma leve y moderada podría reducir el riesgo de desarrollar algunas demencias y la enfermedad de Alzheimer.
El estudio se realizó durante tres años mediante entrevistas periódicas a 3.327 personas de 65 años o más. En el inicio del estudio, 3.202 personas no tenían ningún tipo de demencia.
En el inicio del estudio, aproximadamente la mitad de los participantes no bebían alcohol, un cuarto consumía menos de una copa al día, un 13% bebía una o dos copas al día y un 12% bebía más de dos copas al día. El consumo más común era el vino, seguido de la cerveza y mezcla de bebidas alcohólicas.
Al finalizar el estudio, se observó que el 7% de los participantes desarrollaron demencia y el 3,5% tenía enfermedad del Alzheimer.
En los participantes que tenían un consumo leve y moderado (una o dos copas al día) de alcohol (no queda claro si según el tipo de alcohol consumido puede tener más o menos influencia) se les relacionó una menor incidencia de demencia y alzheimer, destacando que consumir alcohol de manera excesiva puede causar, entre otras enfermedades el 10% de demencia de todos los casos.
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correlación no implica causalidad.
No está de más dar el nombre del artículo científico referenciado: «Current alcohol consumption and its relationship to incident dementia: results from a 3-year follow-up study among primary care attenders aged 75 years and older». El artículo no es gratuito, por lo que no he podido leerlo, pero el abstract (disponible aquí: http://ageing.oxfordjournals.org/content/40/4/456.abstract?sid=7a37ff88-1fbd-4413-8f32-d49178b35cff ) habla de CORRELACIÓN, y no causalidad.
Por lo tanto, beber alcohol podría prevenir el Alzheimer o no prevenirlo; no lo podremos saber partiendo de este estudio.
Un poquito de rigor periodístico, por favor.