Según varios científicos y publicado en la revista The Lancet, cada vez estamos más cerca del trasplante de órganos, tejidos o células provenientes de animales a humanos.
En un par de años, podría ser posible que se iniciaran ensayos clínicos en humanos gracias a la disponibilidad de cerdos genéticamente modificados. El principal problema que hay en este tipo de trasplantes es el ‘rechazo’. El organismo humano le cuesta aceptar un tejido tan extraño, pero científicos destacan que se han producido grandes avances en la tecnología genética y han logrado crear genes capaces de proteger contra los rechazos del sistema inmune humano.
Todo esto de tener éxito, ayudaría a solucionar el problema de las largas listas de espera para recibir un trasplante de órgano que hay en muchos países del mundo.
En pruebas realizadas en primates no humanos, se han dado resultados muy positivos con trasplantes de islotes pancreáticos los cuales ayudan a producir insulina y ayudaría a muchos pacientes con diabetes tipo 1. También ha habido ensayos clínicos muy positivos en primates no humanos enfermos de Parkinson mediante el trasplante de neuronas de cerdo, los cuales han mejorado mucho sus funciones locomotoras.