Aunque no existe una cura, a menudo la diabetes es prevenible e, incluso, irreversible. La Organización Mundial de la Salud estima que en el mundo hay más de 220 millones de personas con diabetes. No formes parte de esa cifra y previene, así lo puedes hacer:
Bajar de peso: Hasta cinco kilos menos hacen una diferencia. El sobrepeso en personas de 50 a 71 años aumenta de 20 a 40% su riesgo de morir prematuramente.
Muévete: el ejercicio permite bajar de peso, reduce el azúcar en la sangre y previene las enfermedades cardíacas, principal causa de muerte entre los diabéticos. Procura caminar de 20 a 30 minutos por día.
Consume menos grasas: la grasa tiene nueve calorías por gramo . Las proteínas y los carbohidratos sólo cuatro. Esto incluye a las grasas buenas, así que también debes limitarlas.
Nada de carbohidratos malos: la harina y el arroz blanco, el azúcar y el jarabe de maíz. Por su poca fibra, son absorbidos rápidamente, elevando el azúcar en la sangre. En consecuencia el páncreas produce insulina. Si lo hace resistente a ella incrementa su producción, lo que conduce a la diabetes.
Ingiere carbohidratos buenos: Frutas, verduras, granos enteros, legumbres y soya. Como son ricos en fibra, impiden que comamos en exceso y ayudan a mantener estable el nivel de azúcar en la sangre.
Medita: Cuando estás tenso, tu cuerpo produce hormonas que elevan tus niveles de azúcar. El estrés crónico puede provocar resistencia a la insulina y esto, a su vez, genera la diabetes. Así que, ¡relájate! La diabetes podría incluso elevar el riesgo de desarrollar alzheimer.
Fuente: Venelogía