Los parches anticelulitis es uno de los tratamientos de belleza que se utilizan para combatir la celulitis, afección padecida mayormente por las mujeres , son muy sencillos de utilizar, ya que es solo cuestión de aplicarlos tu misma en las zonas con celulitis y dejar que los componentes actúen.
Además cuentan con la ventaja de ser económicos, en relación a los clásicos tratamientos de la celulitis, casi no tienen efectos adversos y su efecto se ve de manera rápida.
Los parches anticelulíticos, se colocan sobre las caderas, glúteos, abdomen o muslos y se los debe dejar actuar durante 10 a 24 horas sin quitarlos.
Una vez elegida la zona con celulitis, hay que tener en cuenta que para que resulte un método efectivo deberá llevarse a cabo durante un mes, para luego, irlos rotando por otras zonas afectadas y así entonces, conseguir un resultado parejo y uniforme.
Los principios activos que contienen estos parches son generalmente algas (fucus vesiculosus) que actúan eliminando los líquidos, cafeína y carnitina, que actúan eliminando las grasas, y además, tienen una segunda acción que es la de producir un efecto reafirmante sobre la piel.
El mecanismo de acción es la técnica transdérmica ( absorción de sustancias por parte de la piel) por la cual, se liberan lentamente y de manera sostenida los principios activos durante el tiempo que estén colocados .
Dentro de las contraindicaciones podemos mencionar que el fucus que contiene niveles altos de yodo, el cual puede alterar el correcto funcionamiento de la glándula tiroide y la cafeína que a altas dosis puede producir taquicardia, nerviosismo y ansiedad.
Efectos de los parches anticelulíticos sobre la piel
Gracias al efecto de eliminación de la grasa localizada de la carnitina (vitamina B11) y cafeína, podrá observarse una visible reducción de la celulitis y el aspectos de piel naranja.
Estos efectos ya pueden verse a los diez días de iniciado el tratamiento y serán más significativos a los 30 días. Aquellas personas, con un grado más avanzado de celulitis, necesitarán aplicarse dos parches de manera simultánea cada día durante 30 días seguidos, y luego realizar un descanso de 2.
Aunque hay diferentes marcas de parches y cada una puede variar un poco en su aplicación, aconsejamos leer muy detenidamente sus instrucciones en su modo de aplicación.