El omega-3 es un ácido graso que se ha puesto de moda. Desde hace un tiempo, cada vez son más los alimentos a los que se le añade omega-3. Y es que esta sustancia es esencial para cuidar nuestro organismo, y como nuestro cuerpo no es capaz de producirla debemos tomarla de los alimentos. No obstante, no es necesario a recurrir a alimentos enriquecidos con omega-3, ya que de forma natural la podemos encontrar en numerosos alimentos que además son muy beneficiosos para el organismo, como el pescado –sobre todo el azul-, frutos secos –como avellanas, nueces o pasas-, semillas –por ejemplo, la de soja, chía o lino-, huevo –en concreto en la yema- y aceite de oliva.
PROPIEDADES DEL OMEGA-3
Veamos las principales propiedades del omega-3 que nos ayudarán a cuidar nuestro organismo:
– Corazón fuerte: los alimentos ricos en omega-3 nos ayudan a cuidar nuestro corazón manteniéndolo fuerte y nuestro sistema circulatorio. Esto es gracias a que reduce el colesterol y triglicéridos –así como demás sustancias perniciosas que se encuentren en la sangre-, impide la formación de coágulos en la sangre y disminuye la presión arterial.
– Mente sana: una de las propiedades más importantes por las que el omega-3 ayuda a cuidar el organismo es porque ayuda a cuidar la mente, lo cual es esencial. Se ha demostrado que las personas que consumen alimentos ricos en omega-3 tienen un mejor rendimiento cerebral y mejor concentración y memoria. Además, ayuda a mantener un equilibrio mental, ayudando así contra problemas emocionales como la ira y de salud mental como la depresión o la bipolaridad, también se han demostrado resultados positivos en personas con esquizofrenia, autismo y demencia.
– Ayuda a adelgazar: efectivamente, el omega-3 ayuda a adelgazar. Al ser una grasa buena, se mezcla con las grasas malas presentes en el organismo y las disuelve, reduciendo así la cantidad de tejido adiposo. Esto es muy importante para cuidar el organismo, ya que el exceso de grasa puede derivar en enfermedades varias como la diabetes o la obesidad.
– Anticancerígeno: el omega-3 ayuda a prevenir ciertos tipos de cánceres como el de colon, próstata o mama. Además, ayudan a combatirlo frenando la metástasis o incluso evitando que ésta llegue a ocurrir y reduciendo el tamaño de los tumores, ya que esta grasa evita que las células cancerosas se reproduzcan. Además, el omega-3 en las mujeres es especialmente beneficioso para prevenir o ayudar a combatir los cánceres de tipo hormonal –es decir, los que pueden aparecer en los órganos reproductores femeninos como el de mama- ya que frena la producción de estrógeno.
– Antiinflamatorio: el omega-3 tiene propiedades antiinflamatorias muy potentes para nuestro organismo. Esto lo convierte en ideal para ayudar a curar o paliar enfermedades relacionadas con las articulaciones y en general, ayuda contra cualquier enfermedad en la que haya un mínimo de inflamación. Esta propiedad hace que el omega-3 sea indispensable para los deportistas y personas que realizan mucho esfuerzo físico.
– Lubricante: el omega-3 ayuda a la producción de lubricantes del organismo, sobre todo, las relacionadas con los ojos, ayudando a combatir el “síndrome del ojo seco”.
– Fortalece pelo y uñas: el omega-3 ayuda a la regeneración celular del cabello y de las uñas, ayudando contra la calvicie y evitando que las uñas se quiebren.
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