Reglas dietéticas de la medicina china


bol de arroz - comida china
La Medicina Tradicional China (MTC) propugna algunas reglas básicas de alimentación e insiste en la necesidad de ser flexibles y adaptarlas a la constitución de cada uno.

Todos sus conceptos médicos y de alimentación se apoyan en la filosofía antigua. Uno de sus principios es el de las fuerzas Yin-Yang y otro es el del Qi ó Chi. Clasifican los alimentos según su sabor, color y naturaleza, lo que constituye una información valiosa para regular nuestra salud, si prestamos atención a las señales o síntomas que nos envía nuestro cuerpo.

Para la Medicina Tradicional China la auténtica curación se produce cuando participamos activamente en la corrección de los errores y en la prevención, lo que supone conocer, entender y aplicar algunos principios universales a nuestra vida, a nuestros hábitos.

Reglas básicas dietéticas

Moderación

No debemos sobrepasar las capacidades digestivas ya que los excesos alimentarios perjudican la salud. Tenemos que aprender a dejar un pequeño hueco en el estómago.

«Se debe comer mejor pronto que tarde, lentamente antes que rápido, poco antes que mucho, el alimento debe estar tibio antes que caliente, mejor blando que duro, y salado antes que demasiado salado». Yang Sheng Lu.

Regularidad

Si nuestras comidas son regulares, el conjunto de nuestro sistema digestivo está preparado para recibir los alimentos en buenas condiciones. En efecto, el hábito da reposo, la adaptación es fatigante. Todo en la Naturaleza, incluido el hombre, tiene sus ritmos, sus ciclos.
«Tomar la comida a una hora fija preserva el cuerpo de todo sufrimiento». Lu Shi Chun Qiu

Conciencia de lo que comemos

Cuando nos concentramos en nuestra comida, en los colores, sabores, olores, favorecemos la digestión gracias a dichos estímulos.

Masticación

Come lentamente, tranquilamente y mastica bien. La masticación permite economizar el «Fuego» de la digestión y digerir con ello mucho más fácilmente.

Apetito

Sólo deberías comer cuando tuvieses apetito y hubieses digerido la comida anterior. Según la MTC cuando tenemos de verdad hambre es unas señal de que el sistema digestivo está preparado para recibir nuevos alimentos. Comer sin hambre puede inducir a un estancamiento de alimentos o al «Calor de estómago» que es el origen de numerosas enfermedades.

Estado anímico

La atmósfera durante la comida es muy importante. Ha de evitarse el rencor, la cólera e incluso las risas exageradas. El estrés, el ruido, las emociones fuertes favorecen una mala digestión, lo que puede originar numerosos problemas de salud.

El masaje

Es aconsejable masajear el abdomen para favorecer la digestión, sobre todo después de una comida copiosa. Empieza en el sentido de las agujas del reloj y después cambia hacia el otro lado.

Caminar

No es aconsejable que inicies tus actividades inmediatamente después de haber comido. Una pausa digestiva con un paseo moviliza el Qi. Un proverbio chino dice «camina 100 pasos después de comer y vivirás 99 años».

¿Crudo o cocido?

El Estómago necesita el «Fuego digestivo» para asegurar una buena digestión. La digestión se considera una actividad Yang que necesita mucha energía, por eso muchas personas se sienten cansadas durante la misma. Para la MTC cuando un alimento se acerca a la «temperatura» del Estómago será más fácil su transformación en Qi. Por ello los alimentos crudos son más costosos de asimilar y se necesita movilizar más energía. Lo cierto es que los crudos tienen mucha más energía esencial (Jing) pero no habría que abusar de ellos si se tienen problemas digestivos, o un Estómago delicado. Algunas maneras de cocinarlos permiten mantener su gran valor nutritivo.

Los alimentos amargos

Como ya se ha dicho, cada sabor, en cantidad moderada, tonifica un órgano y en exceso, lo daña. Una dieta equilibrada debe contener todos los sabores, pero con preponderancia del sabor dulce, que potencia el centro, el Bazo/Estómago y sus actividades digestivas.

El sabor amargo tonifica el elemento Fuego, el Corazón, el Intestino Delgado, la sangre. Tiene naturaleza Yin: Favorece el drenaje y la eliminación hacia abajo: evacuación y diuresis . En un principio laxa pero después produce calor en el Intestino Grueso. Tiene acción secante. Favorece la digestión y abre el apetito. Tiene efecto fortificante y tonificante.

El amargo «seca»: es útil en caso de humedad interna, pero hay que evitar el exceso en casos de deficiencia de sangre y/o líquidos orgánicos. Favorece la digestión y abre el apetito. Actúa directamente sobre la sangre. (Ejemplo de alimentos amargos: achicoria, té, café, diente de león, espárragos, endivias, berros, pepinos…).

 

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