Neumonía


neumonía

¿Qué es la neumonía?

Es la causante de la mayoría de las hospitalizaciones en cuanto a vías respiratorias se refiere, casi siempre provocada por bacterias, aunque también puede agravarse con el virus de la gripe (conocer sobre la enfermedad de la gripe) o complicarse aún más si existe varicela en el paciente.

La neumonía es cuando el tejido pulmonar se inflama en forma de defensa por la presencia de una infección. La división del pulmón se constituye de 2 partes importantes las cuales son:

  • Los bronquios que son un tubo o conducto por medio del cual el aire pasa.
  • Los alvéolos son unos sacos de aire pequeños en los cuales se efectúa el intercambio de oxígeno para darle paso a la sangre y el dióxido de carbono que se debe expulsar fuera del cuerpo.

Cuando una neumonía ataca el principal afectado es el alvéolo pues le provoca inflamación e irritación y por consecuencia de esto se llena de líquido infeccioso que da como consecuencia los problemas respiratorios como dolor al intentar respirar.

El margen de personas que más lo padecen son jóvenes de entre 23 a 34 años y ancianos que superan los 75 años de los cuales los ancianos del sexo masculino que viven en asilos o lugares de descanso para personas de la tercera edad son los que más la padecen y los casos se incrementan al llegar la etapa invernal del año.

Los niños no están exentos de padecer esta enfermedad que se ha vuelto mortal entre los infantes menores de 5 años.

Vídeo donde el Dr. Marco Antonio Sotomayor nos cuenta sobre esta enfermedad
 

¿Cuáles son sus causas?

El principal factor por el que se contrae esta enfermedad es que se aspiran los microorganismos que provienen de la orofaringe, pero en el 50% de los casos no es preciso determinar el agente que es el responsable de este padecimiento.

Se deberá analizar el lugar de adquisición, que es un factor de riesgo asociado al igual que la ubicación geográfica del paciente y la gravedad infecciosa.

En el caso de los adultos lo que causa la neumonía son bacterias como el neumococo (Streptococcus pneumoniae), aunque también influye el vistos de la gripe o reciente varicela al igual que estar por mucho tiempo expuesto a hongos lo que también podría ocasionarla.

 

Tipos de neumonías

pulmones y neumonía
Existen diferentes tipos, los cuales se dividen de una forma en que la medicina la clasifica y es con base a como se adquiere la infección por ejemplo la neumonía que se adquiere en la comunidad o la que se contagia dentro de un hospital.

  • Neumonía de la comunidad (NAC): Tal cual su nombre lo dice, se contagia fuera de las áreas médicas y hospitales y esta clase es la más común de padecer afectando a millones de personas al año según estadísticas realizadas por instituciones médicas del mundo, siendo la temporada invernal cuando se contrae con mayor facilidad esta enfermedad.
  • Neumonía adquirida en el hospital (HAP): Este tipo es adquirido dentro de las instalaciones médicas, es decir cuando el paciente se encuentra hospitalizado por un motivo diferentes a esta afección y por lo regular este tipo es más grave puesto que el paciente ya ingresó al hospital por otra enfermedad, aunada la neumonía se complica el cuadro clínico. El riesgo aumenta si el paciente cuenta con un ventilador de asistencia respiratoria, lo que lo hace más propenso al desarrollo de la HAP.

Otra forma de clasificar la neumonía es por medio de como las células inflamatorias son filtradas dentro del tejido pulmonar o como se ve el tejido afectado:

  • Neumonía lobular: Ocasiona la inflamación del lóbulo en el pulmón que por lo regular afecta a todos los espacios aéreos en este lóbulo.
  • Bronconeumonía difusa: Ocasiona infiltrados en los parches de la inflación dentro de los sacos de aire que se encuentran en los pulmones; en comparación de la neumonía lobar es más difusa.
  • Neumonía lipoide: Su principal característica es mediante la acumulación de grasa que se encuentra dentro de los espacios aéreos y por lo regular es ocasionada por las aspirar aceites, también se asocia con obstrucciones de las vías respiratorias.

En la mayoría de las ocasiones, los tipos de neumonía se clasifican por el tipo de organismo que ocasiona la inflamación por ejemplo la neumonía bacteriana (provocada por baterías), viral (ocasionada por virus) o fúngica (la causa un hongo).

De esta misma forma el nombre del organismo en específico que la ocasione se utiliza para clasificar los diferentes tipos de neumonías, tal es el caso de neumonía neumocócica o neumonía por legionella por dar un ejemplo.

  • Neumonía por aspiración: Es una de las más comunes y este tipo es desarrollada por causa de inhalar alimentos, bebidas, vómito, saliva u cualquier otro líquido dentro de los pulmones, ocasionado por la alteración de lo que llamamos reflejo de deglución por ejemplo en personas que han sufrido una intoxicación o alguna lesión en el cerebro.
  • Neumonía atípica: Esta clase es causada por diversos tipos de bacterias, su nombre se deriva de los síntomas siempre son diferentes de los de otras neumonías ocasionadas por bacterias.

 

Síntomas de la neumonía

persona con síntomas de neumonía
Los principales síntomas o los más comunes siempre implican al sistema respiratorio y las vías aéreas bajas como los siguientes:

  • Expectoración o también llamada tos productiva.
  • Fiebre.
  • Dolor en el torax o también llamado dolor torácico pleurítico, esto es el aumento de los movimientos respiratorios.
  • Tos.

Si el caso de neumonía es más grave es probable que puedan aparecer los siguientes síntomas:

  • Problemas al respirar, es decir, cuesta trabajo el respirar normalmente.
  • Aumento considerable de la frecuencia cardíaca y por consecuencia también aumentará la frecuencia respiratoria.
  • Sudoración.
  • Se emiten sonidos al respirar (inspiración y espiración). Esto el medico lo debe confirmar mediante la auscultación del paciente con el fonendoscopio y es una síntoma importantísimo que sumado a los anteriores confirman la posible presencia de esta enfermedad en el enfermo.

En los pacientes ancianos o con inmunodepresión los síntomas de la neumonía son complicados de especificar pues no presentan fiebre y en ocasiones solo se empeoran otras enfermedades que padecen sin motivo aparente.

Existen dos cuadros clínicos diferentes, según la forma en que se manifiestan los síntomas:

  • Cuadro clínico típico: Empieza de una manera brusca en menos de 48 horas que va evolucionando con escalofríos, temperatura corporal mayor a 37.5° C, acompañado de tos productiva, femas que contienen pus y un fuerte dolor en el tórax que aumenta cada vez más con cada respiración. Estos síntomas son ocasionados por lo regular por bacterias como el neumococo.
  • Cuadro clínico atípico: Se caracteriza principalmente por tos seca (conoce remedios para tratar la tos) y algunos tipos de molestias que varían entre paciente y paciente por lo que no se pueden especificar al ser diferentes, se manifiesta también por dolor en las articulaciones y los músculos, acompañados de dolor de cabeza, alteraciones gastrointestinales y del estado de conciencia del paciente.

 

Diagnóstico

Por lo regular para poder tener la certeza y diagnosticarla eficazmente, se debe hacer una radiografía de tórax, acompañado de la auscultación del paciente.

Ya establecido el diagnóstico de presencia de neumonía se deberán realizar más pruebas que arrojarán como resultado el poder detectar que tipo de germen es el causante (hongo, bacteria, virus) y poder conocer el grado de severidad en que se encuentra.

Una vez realizado lo anterior, se deberá dar comienzo al tratamiento lo más pronto posible.

En los pacientes que la enfermedad es leve no será necesaria la hospitalización, se debe analizar la gravedad del caso, las condiciones en las que se vive, estado social y demás características del contexto donde habita el enfermo, para así tomar la decisión de ser ingresado al hospital.

 

Tratamiento para la neumonía

pastillas y antibiótico
En el caso de ser ocasionada por bacterias se debe medicar antibióticos, en la actualidad, existen un sinfín de tipos de antibióticos.

La decisión de cuál será el mejor para el tratamiento va a depender de la gravedad y características del enfermo, por lo que el médico al analizar esto, deberá destinar la dosis y el tipo de medicamento que se administrará.

En la mayoría de las afecciones de neumonía no se necesita realizar un estudio para determinar qué tipo de germen es el que ocasiona el padecimiento, pero en casos graves o cuando el paciente no responda al tratamiento se deberán realizar cultivos ya sea de muestras de sangre o respiratorias, una punción pulmonar o una broncoscopia. Siendo en este caso la administración de antibióticos de manera intravenosa para lograr mejores resultados.

 

¿Cómo prevenir la neumonía?

Existen muy pocas medidas preventivas frente a el cuidado o protección a la aparición de ella, ya que la gran mayoría de ésta da comienzo a partir de un proceso donde se desarrolla un virus, por ejemplo el de la gripe.

Las vacunas que se aplican cada año y que son antigripales son una forma de prevención y son especialmente recomendadas para las personas que rebasen los 65 años de edad, siendo este tipo de pacientes los más vulnerables a padecer una neumonía; también si se padecen enfermedades de los bronquios o de pulmones de una forma crónica, al igual que enfermedades de tipo renal, cardíaco o hepático se recomienda aplicar esta vacuna anualmente.

Otra forma de prevención es aplicar la vacuna antineumocócica que previene que la neumonía ocasionada por baterías ataque, siendo candidatos para aplicarla, también los adultos mayores de 65 años o que padezcan enfermedades de tipo cardiovascular, pulmonar, alcoholismo, hepáticas, ausencia de bazo por causa de cirugía, pacientes con cáncer o quienes han sido sometidos al trasplante de algún órgano.

Es importante que los pacientes que padecen asma o bronquitis de manera crónica inicien un tratamiento de antibióticos al primer síntoma o sospecha por parte del médico de que se pudo contraer la enfermedad, siendo él quien decida la dosis y tipo de medicamento para ese paciente en particular.

La prevención por parte de cualquier persona implica

  1. No exponerse a cambios bruscos de temperatura.
  2. No estar cerca de personas que padezcan alguna enfermedad de las vías respiratorias, como gripe, evitando saludos de beso o estar cerca de ellos al toser o estornudar
  3. Lavar sus manos constantemente, sobre todo al regresar a casa y se ha tocado pasa manos, o lugares que son usados por varias personas.
  4. Usar gel antibacterial.
  5. Si se está en lugares con aire acondicionado o calefacción cuidar que estos se mantengan libres de hongos dando un mantenimiento constante.
  6. Uso de cubre bocas.
  7. Evitar fumar o estar cerca de personas que realizan esta actividad.

Prevención por parte de hospitales o centros médicos

En el caso de la prevención que se debe tener en los hospitales o nosocomios para evitar su propagación se deben tener las siguientes consideraciones:

  1. Limpieza extrema de todo el equipo e instalaciones en general, sobre todo cuando se está atendiendo al paciente.
  2. Lavado constante de manos por parte del personal al igual que el uso de guantes, cubre bocas y gel antibacterial.
  3. Se debe de detener la alimentación por vía oral a los pacientes que presenten riesgo de aspiración.
  4. Se debe elevar al cabecero de la cama y realizar ejercicios respiratorios profundos al igual que terapia para poder eliminar las secreciones respiratorias. En el caso de los pacientes que están en un riesgo alto como por ejemplo los que pasaron por una operación de tipo torácico o aquellos que manifiesten debilidad y encamados.
  5. Utilizar materiales estériles.
  6. Restricción de visitas de personas con gripe o síntomas de padecimientos respiratorios, sobre todo a pacientes que se encuentren en estado delicado de salud o de edad avanzada.

La neumonía es un padecimiento común en la población mundial que ha cobrado varias vidas.

Una cultura de prevención y cuidado aunado a conocer los principales síntomas serán las mejores armas para combatir esta terrible enfermedad pues así disminuiremos los posibles casos y los ya diagnosticados se podrán tratar de una manera pronta y eficaz.

Es importante acudir al médico lo más pronto posible al manifestarse o aparecer cualquier síntoma, él sabrá el tratamiento adecuado que debemos seguir. También es importante recordar que se debe evitar la automedicación.

Vídeo del Doctor TV sobre esta enfermedad, el asesino del invierno
 

Puntúa el artículo

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (sin votaciones todavía)
Cargando...
   

El contenido ofrecido en MundoAsistencial.com es sólo para propósitos educativos e informativos. No sustituye consejos médicos profesionales, de tratamientos o de diagnósticos. No desatiendas o tomes decisiones terapéuticas sin consultar los consejos de tu médico ni retrases el tratamiento que te recomienda debido a algo que hayas leído en esta web.


Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Una idea sobre “Neumonía