Según publica la revista científica «Nature«, una investigación internacional coordinada por el Institut de Recerca Biomèdica de Bellvitge (Idibell) y Instituto de Estudios Avanzados de Trieste, en Italia, destaca que un medicamento, concretamente la rapamicina, utilizado para evitar los rechazo de órganos trasplantados, podría retrasar la aparición de enfermedades como el Parkinson o el Alzheimer.
La investigación se inició hace cinco años cuando se observó que pacientes afectados por el Parkinson tenían un déficit de proteína UCHL1. Este déficit de proteína se desconocía el motivo porque se producía y para hallar esta causa se inició el proyecto europeo Dopaminet, el cual estudiaría la impliación de las neuronas dopaminérgicas (células cerebrales cuyo neurotransmisor es la dopamina) en el Parkinson.
Hasta ahora las pruebas se han realizado ‘in vitro’ con bueno resultados. Ahora el siguiente paso según los investigadores es realizar la pruebas en animales y también combinar la rapamicina con otros medicamentos.
La rapaminicina fue descubierta en los años 70 en la Isla de Pascua. Es un antibiótico natural inmunosupresor. Se realizaron algunas investigaciones y pruebas en ratones viejos y se logró prolongar un 38% su esperanza de vida, dando posibilidad a ralentizar el proceso de envejecimiento, aunque a la vez como mala noticia, también suprimía algunas funciones del sistema inmunológico.
Actualmente se utiliza en las cánulas implantadas en los pacientes para mantener sus arterias coronarias abiertas y para prevenir el rechazo de órganos trasplantados. También el Instituto Nacional del Cáncer Americano (NCI) está realizando investigaciones como posible tratamiento para el cáncer.
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