Los anuncios publicitarios nos cuentan que tomar yogur con probióticos (bacterias beneficiosas) reducirá la hinchazón abdominal y regulará nuestro sistema digestivo. Pero no es posible garantizar que el consumo regular de lactobacillus en el yogur mejorará nuestra salud.
La mayoría de las personas que toman estos probióticos notan un cambio en sus hábitos intestinales, para bien o para mal. Es cierto que estos productos no provocan daños, pero tampoco se puede esperar un milagro de ellos.
El intestino contiene cientos de diferentes tipos de bacterias, que forman un complejo ecosistema. Los probióticos parecen nutrir ciertas células. Por ejemplo, el lactobacillus produce una cadena corta de ácidos grasos que las células del colon utilizan como combustible.
Nuestro sistema inmune se basa principalmente en la salud intestinal, y cualquier problema en los intestinos puede tener consecuencias de gran alcance. Por ejemplo, la enfermedad inflamatoria del intestino causa inflamación en las articulaciones, los ojos y la piel.
Nadie sabe cómo funcionan los probióticos, pero en teoría, corrigen la desregulación intestinal, modulan el sistema inmunológico y alivian los síntomas.
Desafortunadamente, hay pocos estudios creíbles que demuestren el trabajo que hacen los probióticos dentro del organismo. La mayoría de los estudios han mostrado resultados variables. En los ensayos clínicos para el síndrome del intestino irritable, algunos pacientes experimentaron mejoría en los síntomas y otros no. En un estudio sobre la infección del tracto respiratorio superior, los probióticos redujeron la duración de la enfermedad, pero los resultados no fueron los mismos cuando se utilizó un probiótico diferente.
Debido a que los probióticos no están estandarizados, es difícil saber cuánto ingieres en un yogurt. Las cápsulas tienden a ser más potentes en cuanto a dosis y efectos. Pero éstas también pueden contener otros productos indeseables, tales como laxantes, que pueden ser adictivos, o enzimas digestivas, que pueden causar úlceras.
Si la pregunta es si se debe o no tomar probióticos, la respuesta es que depende de cada uno. No existe ninguna investigación sobre probióticos que demuestre que son beneficiosos para el bienestar general, pero eso no quiere decir que no haya ningún beneficio clínico.
Los probióticos son eficaces en la prevención de la diarrea que puede provocar el uso de antibióticos. Para ello deben tomarse dos horas antes o después de los antibióticos.
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