Consejos para recuperar la silueta después del parto


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A pesar que muchas mujeres quedan con su cuerpo en perfectas condiciones después de tener su bebé a otra muchas no les resulta tan fácil volver a tener la silueta de antes. La celulitis, flacidez, estrías y algunos kilos de más son algunas de las secuelas que quedan en el cuerpo después de un embarazo.

Para solucionar esos problemas estéticos que afectan no sólo el cuerpo sino la autoestima de las mujeres, existen diferentes alternativas entre ellas masajes, cirugía, dieta y ejercicio físico.
Inmediatamente después del parto es imprescindible esperar un tiempo para someterse a una intervención estética, los kilos de más irán desapareciendo paulatinamente.

Terminada la lactancia los senos suelen quedar caídos y los kilos ganados y la flacidez continúan.

El primer paso es no desesperarse ya que los especialistas aseguran que el peso ganado durante el embarazo se pierde pasados unos 6 meses del parto, como segunda medida se debe consultar al médico para tratar con él las diferentes alternativas y cuándo pueden ponerse en marcha.

El ejercicio físico es una de las formas para conseguir que el cuerpo vuelva a tener su aspecto anterior al embarazo, la rutina de entrenamiento a seguir dependerá de cómo se encuentre la mujer físicamente, no es igual haber pasado por una cesárea que haber tenido el bebé por parto natural. Otro punto importante es la frecuencia con la que se entrenará.

Los ejercicios localizados son una opción excelente para el problema de flacidez tanto de abdomen como de senos.

El entrenamiento debe comenzarse de forma suave sin realizar demasiados esfuerzos e ir incrementándolo gradualmente. Para complementar los ejercicios localizados las caminatas son aconsejables. Una vez conseguido el ritmo adecuado puede aumentarse la intensidad de las rutinas.

La dieta es otro punto importante a tener en cuenta, si se está en la etapa de lactancia del bebé deberá ser muy equilibrada y tener presente la cuestión del líquido, cuyo consumo será mayor que de costumbre para estimular una buena producción de leche.

Siguiendo este tipo de plan de dieta y ejercicio físico el cuerpo mejorará mucho, pero existen otras alternativas como:

• La mesoterapia hecha de forma alternada con masajes de linfodrenaje estimularán la circulación y reforzarán las paredes de los vasos sanguíneos lo que ayudará a eliminar grasa y líquidos retenidos entre las células.

• Productos como cremas anticelulíticos contribuirán a mejorar el aspecto de la piel, el peeling corporal es otra alternativa para las zonas más críticas, realizado con un producto exfoliante liberará a la piel de células muertas y favorece la acción de otros tratamientos anticelulíticos que puedan estar haciéndose.

• La liposucción es un remedio más radical, es una intervención quirúrgica realizada con cánulas que permiten la aspiración de grasa acumulada, de todas formas esta opción será una vez terminado el período de amamantamiento, mientras que las otras alternativas pueden comenzarse antes.

Con un poco de paciencia y constancia el cuerpo volverá a ser el de antes, la dieta el ejercicios y el resto de los tratamientos servirán para cumplir este objetivo.

 

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