Cinco errores sobre nutrición


número cinco
Quizás ya estés planificando nuevos proyectos para el próximo año 2013 y entre ellos algunos cambios personales y en el estilo de vida.

Eso es muy bueno, tanto más confiado y seguro estés de tu proyecto, más probabilidades habrán de que se realice.

Uno de los planes o proyectos que pretendemos cada año es la de perder peso, abandonar la vida sedentaria y recuperar nuestro peso corporal ideal.

Si esta es tu meta debes tener en cuenta varios consejos y advertencias, que son muy útiles para no caer en falsas expectativas o arrebatamientos de motivación.

Las Privaciones: no hagas largas listas de alimentos que tú estás seguro no deberías comer. La privación total de tus alimentos y comidas favoritas no es realista. Mejor intenta con eliminar completamente algunas comidas sobre todo en la frecuencia y en la cantidad de su consumo, porque mientras más prohibida te parezca más querrás comerlas. Encuentra formas adecuadas, equilibradas y sustitutivas de esas comidas. Recuerda pensar siempre en moderación, no en eliminación.

Las compras: cuando vas a comenzar un plan de dieta para perder peso, puede ser que pienses en comprar alimentos pre-elaborados que se anuncian o son descritos como muy bajos en calorías, o controladores de las calorías del cuerpo. Ese enfoque es probable que sea útil en periodos cortos, pero no es nada sustentable. Busca, investiga, toma clases, compra un libro o un DVD y aprende a confeccionar platos en tu cocina con los cuales obtengas resultados similares, o sea, comidas bajas en calorías, además éstas te resultarán más atractivas y deliciosas que las pre-elaboradas. Esta es la estrategia mejor y que te dará resultados a largo plazo, además es más económica.

Los productos limpiadores del organismo: muy de modas en este año, lo mismo en forma de jarabes, comidas y bebidas, estos limpiadores prometen una desintoxicación y “limpieza” profunda de nuestro organismo. Esto también incluye recetas a base de alimentos y/o productos limpiadores, que prometen ser aun más efectivos para poder bajar de peso. Esperar resultados rápidos puede ser muy motivador, pero es posible razonar y pensar en formas más adecuadas, equilibradas, no tan absolutas. La alimentación y la dieta variada, rica en frutas, vegetales, alimentos que aporten fibras y proteínas, como la de los pescados, siempre son un buen camino.

Las negaciones: típicas en cualquier régimen de dietas o de entrenamiento. Son las frases como: no puedo, no puedo, no combina, no es posible. Estas repuestas te desestimularán, parecerá una carrera militar en vez de un camino hacia la recuperación de peso corporal. Asegúrate siempre de adicionar cosas positivas, no de sustraer o quitártelas.

Las dietas: esa es la palabra, la que siempre aparece cuando de bajar de peso se trata. Antes de confiar y hacerte devoto a una dieta y después resultar como que frustrado, es necesario que te concentres en hacer algunos pequeños cambios en tus rutinas diarias. Debes investigar y estudiar sobre cómo aprovechar más tus días y en qué cosas debes concentrarte respecto a tus hábitos que no favorecen tu salud, ni psíquica, ni espiritual, ni física.
Los estudios nos muestran continuamente que pequeños cambios mantenidos, obtienen mejores resultados que intentar cambios numerosos y drásticos. Esos cambios pueden ser ingerir menos cantidad azúcar, menos alimentos fritos, menos dulces y panes, no dejarlos completamente, sino reducirlos.

 

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